Limpiafondos manuales de piscinas

El limpiafondos manual de piscina es la herramienta indispensable para cualquier propietario, ofreciendo una limpieza precisa y controlada del fondo. A diferencia de los limpiafondos automáticos, el aspirador manual de piscina permite atacar suciedad pesada, lodo o algas incrustadas con la máxima eficacia, especialmente en puntos de difícil acceso como escaleras o esquinas. Este sistema, simple y altamente fiable, se conecta directamente a tu depuradora para garantizar que la suciedad sea eliminada por completo del vaso. 

Cómo aspirar el fondo con un limpiafondos manual

Para lograr una limpieza eficaz sin enturbiar el agua, es crucial seguir un proceso de conexión y aspiración adecuado. 

Preparación y conexión al sistema de filtrado

Lo primero que debes hacer es introducir el limpiafondos manual (cabezal y manguera) en la piscina. Asegúrate de que la manguera se llene de agua para purgar el aire. Conecta la manguera a la toma de aspiración o al skimmer de la piscina, asegurándote de que la válvula selectora de la depuradora esté en posición de "filtración" o, si hay mucha suciedad fina, en "vaciado/desagüe".

Técnica de aspiración para evitar turbidez

Para que el cabezal del limpiafondos manual absorba toda la suciedad e impurezas depositadas en el fondo, debes mover la pértiga lentamente y de forma uniforme. Las pasadas deben ser rectas y sin movimientos bruscos. La clave es la lentitud: si te mueves rápido, la succión levanta la suciedad más fina (como tierra o lodo), enturbiando el agua en lugar de aspirarla.

Pasos posteriores a la limpieza

Al finalizar la limpieza, es vital limpiar el prefiltro de la bomba (si se ha usado la posición de filtración) y reponer el agua que se perdiese, especialmente si se utilizó la aspiración a desagüe. Además, siempre es recomendable analizar la acidez del agua, el nivel de pH y cloro, para corregir los niveles si fuera necesario.

Ventajas clave de comprar un Aspirador manual para tu piscina

Aunque la limpieza sea un proceso activo, los limpiafondos manuales de piscina ofrecen beneficios insuperables que justifican su presencia en tu equipo:

• Su precio es muy económico, siendo la opción más accesible para el mantenimiento del fondo.
• Tienen una larga duración gracias a su simplicidad mecánica y fiabilidad.
• No consumen electricidad ni necesitan complejas programaciones.
• No necesitan mantenimiento más allá de la limpieza ocasional y la posible sustitución del filtro de bolsa (si el modelo lo incorpora).
• Es la herramienta ideal para suciedad pesada o sedimento denso que podría sobrecargar el filtro de un robot automático.

El cabezal limpiafondos ideal

El "mejor" limpiafondos para piscina manual es aquel que se adapta a las particularidades de tu revestimiento y suciedad. El cabezal (o cepillo aspirador) es la pieza clave:

• Para piscinas de liner, fibra o poliéster: busca cabezales con ruedas de goma o cepillos suaves para evitar dañar la superficie. Los modelos triangulares son perfectos para alcanzar bien las esquinas.
• Para piscinas de gresite o cemento: Puedes usar cabezales con cepillos más resistentes o modelos pesados que garantizan un contacto total con el fondo y maximizan la succión. Recomendamos un cabezal con buen peso propio.

¿Cada cuánto se tiene que cambiar el filtro del cabezal?

Algunos limpiafondos manuales cuentan con un filtro tipo bolsa para recoger residuos grandes antes de que lleguen al sistema. Si tu modelo lo incorpora, lo recomendable es sustituirlo al menos 1 vez al año o tras finalizar la temporada de baños. Aunque actúan más como una bolsa de residuos que como un filtro fino, mantenerlo en buen estado garantiza que el aspirador manual funcione siempre de forma óptima.