Tipos de robot limpiafondos eléctricos, encuentra el adecuado en Mercapool
Para simplificar tu búsqueda del robot de piscina eléctrico perfecto, podemos clasificarlos en base a sus principales funcionalidades: el área de limpieza que cubren, su sistema de filtración y su modo de alimentación.
Robot limpiafondos según el tipo de limpieza (alcance)
La principal diferencia entre modelos de limpiafondos eléctricos radica en la zona de la piscina que son capaces de cubrir:
Solo el fondo de la piscina: los modelos más básicos y económicos. Son suficientes para piscinas con formas sencillas o para quienes buscan un mantenimiento simple del fondo.
Fondo y paredes de la piscina: son los modelos más demandados. Cuentan con mayor potencia y tracción para subir las paredes del vaso.
Fondo, paredes y línea de flotación: son los limpiafondos eléctricos más completos. Son capaces de fregar la zona donde se acumula la mayor suciedad (cremas, aceites, etc.) al mantenerse activos justo en la superficie del agua.
Sistemas de filtrado del limpiador eléctrico
El filtro es el corazón de cualquier limpiafondos eléctrico. Se diferencian por el tipo de material y la facilidad de limpieza:
Filtro tipo cesta o de cartucho: es el sistema más común y recomendado. Su manipulación y limpieza es muy sencilla (simplemente se aclara). Además, muchos modelos permiten adquirir cartuchos de distintas micras para retener suciedad más fina.
Filtro tipo bolsa (textil): utiliza una bolsa de tela. La retención de suciedad es efectiva según el gramaje, pero su limpieza y vaciado suelen ser algo más engorrosos que los de cesta.
Alimentación de los limpiafondos eléctricos de piscina
El modo en que reciben la energía es clave para piscinas con problemas de accesibilidad:
Conexión directa a la red eléctrica (cable): son los más vendidos y fiables. Debes asegurar un cable de la longitud adecuada para cubrir toda tu piscina desde la toma de corriente más cercana.
Mediante baterías recargables (limpiafondos automaticos): Ideales para piscinas sin acceso fácil a la red o para evitar cables. Ofrecen una autonomía limitada, pero suficiente para un ciclo de limpieza completo.
Claves para elegir el limpiafondos eléctrico de piscina
Antes de comprar un limpiafondos eléctrico, es crucial evaluar las características específicas de tu piscina para garantizar una compra acertada. Considera estos aspectos esenciales:
Dimensiones y forma de la piscina: asegúrate de que el limpiafondos cubra el largo, ancho y profundidad de tu piscina. Para formas libres o muy irregulares, necesitarás un modelo de gama alta con sistemas de navegación más avanzados.
Material de revestimiento: el material del suelo y las paredes (gresite, liner, poliéster, etc.) determina el tipo de cepillo y el agarre necesarios. Las superficies más resbaladizas (como el gresite) requieren cepillos de mayor adherencia y sistemas de tracción robustos.
Ubicación del vaso: una piscina rodeada de vegetación generará más residuos. En estos casos, prioriza un modelo con mayor capacidad de filtración y ciclos de limpieza de fondo intensivos.
Los Mejores Limpiafondos eléctricos que puedes comprar en Mercapool
Te presentamos una selección de 4 robots de piscina eléctricos que destacan por su fiabilidad y rendimiento. Recuerda que invertir en un modelo de mejores prestaciones a menudo resulta más rentable a largo plazo, no solo por la calidad de la limpieza sino por la garantía y el servicio técnico de la marca.
En nuestra selección, solo encontrarás limpiafondos eléctricos de piscinas de marcas reconocidas que garantizan el mejor rendimiento y soporte técnico:
Zodiac: Marca francesa que ofrece una gama muy robusta y fiable de **limpiafondos eléctricos**. Sus modelos son conocidos por su excelente relación calidad-precio y la durabilidad de sus componentes.
AstralPool: especialistas en equipamiento de piscina, sus limpiafondos eléctricos AstralPool se distinguen por su ligereza y su gran velocidad de limpieza, ideales para quienes buscan un ciclo rápido y efectivo.
La vida útil promedio de un limpiafondos eléctrico de calidad oscila entre los 5 y 8 años, aunque con un mantenimiento riguroso puede superar la década. La duración depende drásticamente de la frecuencia de uso, la química del agua y cómo se almacena el equipo.
Factores que alargan su vida útil:
Sacarlo del agua: No dejarlo sumergido cuando no trabaja evita la corrosión de los sellos del motor.
Limpieza de filtros: Vaciar la cesta tras cada ciclo reduce la tensión en la bomba de aspiración.
Almacenamiento: Guardarlo en un lugar seco y a la sombra (el sol directo cristaliza los cables y plásticos).
Rotundamente no. Nunca debes dejar el limpiafondos eléctrico dentro de la piscina permanentemente. Aunque están diseñados para trabajar bajo el agua, la exposición constante a los productos químicos (cloro y correctores de pH) degrada prematuramente los plásticos, las gomas de tracción y, lo más crítico, el cable de alimentación.
Definitivamente sí, merecen la pena, especialmente si valoras la independencia del sistema de filtración y el ahorro energético. A diferencia de los limpiafondos hidráulicos, los robots eléctricos son totalmente autónomos: recogen la suciedad en su propio filtro, evitando saturar la arena o cartucho de tu depuradora principal.
Si tu robot limpiafondos eléctrico no sube las paredes, la causa más probable (en el 90% de los casos) es una cesta de filtros saturada o la presencia de algas invisibles (biofilm) en la pared que la hacen resbaladiza.
Lista de comprobación rápida:
Limpieza de filtros: si la bolsa o cesta está llena, el robot pierde la fuerza de succión necesaria para adherirse a la vertical.
Química del agua (Biofilm): aunque el agua se vea clara, las paredes pueden tener una capa grasa de algas incipientes. Pasa la mano; si resbala como jabón, el robot no traccionará. Necesitas cepillar y ajustar el cloro.
Rodillos desgastados: si las esponjas o cepillos de PVA están viejos y lisos, no tendrán agarre.
Cuando un robot limpiafondos arranca y se detiene a los pocos segundos, suele ser un mecanismo de autoprotección activado por aire atrapado o una obstrucción en la hélice.
Soluciones inmediatas:
Purga de aire insuficiente: Al meterlo en el agua, ¿has esperado a que salgan todas las burbujas? Si queda aire dentro, el sensor detecta que "no está sumergido" y se apaga para no quemar el motor. Vuelve a sumergirlo y balancéalo hasta que no salgan burbujas.
Obstrucción del impulsor: Revisa la turbina superior. A veces, un pelo, una goma elástica o una ramita bloquean el giro.
Fuente de alimentación: En modelos antiguos, un fallo en el transformador puede cortar la energía bajo carga.