A todos nos gusta una piscina con el agua cristalina que nos invita a tomar un baño refrescante. Pero… ¿Qué pasa si el agua de mi piscina está turbia? Si ya no puedes ver el fondo de tu piscina, hay que realizar una serie de tareas de mantenimiento. A continuación te explicamos cómo eliminar la turbidez del agua en una piscina.
¿Cuáles son las causas de la turbidez del agua?
El agua turbia en la piscina puede tener muchas causas las cuales pueden ser difíciles de averiguar. Mientras que los niveles de pH pueden ser alteradas o que hay un exceso de alcalinidad o excesiva dureza, hay otras causas clave que provocan una piscina con agua turbia. Aquí explicamos otros factores que deben ser considerados a la hora de preguntarse cómo surge la turbidez en el agua de una piscina, del mismo modo que puede ocurrir con el agua turbia en una piscina desmontable.
Acumulación de partículas o sedimentos
Una causa principal para el agua turbia en la piscina pueden ser problemas de filtración. La filtración es esencial para un buen tratamiento del agua de una piscina ya que allí es donde se capturan las partículas sólidas en el agua. De todas maneras, los filtros, sean más grandes o más pequeños, pueden contaminarse con desechos orgánicos, piedrecitas, hojas, cabello, polvo, arena y muchos otros elementos. Esto puede hacer surgir la turbidez en el agua de una piscina por lo cual debemos saber cómo limpiar el filtro de arena de una piscina.
Contaminación por bacterias o algas
Otro factor que puede causar el agua turbia en la piscina puede ser que bacterias o algas hayan contaminado la piscina. En muchos casos, estas impurezas llevan a que el agua de una piscina esté turbia. Una gran cantidad de desechos como hojas en la piscina puede bajar los niveles de desinfectante. Cuando los niveles de desinfectante son bajos y no hay suficiente cloro para desinfectar el agua, las bacterias en el agua sobreviven en el agua durante más tiempo y se multiplican. En este caso, el agua supone riesgos incluso para nuestra salud.
Realizar pruebas del agua y ajustar sus niveles químicos
Para eliminar la turbidez del agua de una piscina debemos tomar varias medidas, por lo que a continuación repasaremos algunas para saber cómo aclarar el agua turbia de una piscina:
Medir el pH y ajustarlo a buen nivel
Ya que encontrarse una piscina con agua turbia suele ser debido a los niveles de pH alterados, hay que medir el pH y ajustarlo según sea necesario. El pH se puede medir fácilmente con un kit de prueba de pH que puede consistir en tiras reactivas o soluciones químicas que cambian de color según el nivel de pH del agua de la piscina. Para luego subir o bajar los niveles de PH pueden usarse distintos químicos. Aunque maneras naturales como calentar el agua de la piscina para bajar el pH sean más deseadas, estos métodos no suelen ser del todo efectivas y pueden fallar por lo que recomendamos el uso de productos químicos. Después de tratar la piscina con un químico, hay que esperar unas horas antes de poder bañarse de nuevo.
Balancear los niveles de cloro de la piscina
Una vez que el pH esté ajustado, toca controlar los niveles de cloro en la piscina. Para que una piscina esté limpia y sana, necesita los niveles adecuados de un desinfectante como cloro para eliminar los microorganismos presentes en el agua. Si nos encontramos con agua turbia en la piscina hay que balancear los niveles de cloro porque ya no puede cumplir su función. Esto se puede realizar utilizando un estabilizante de cloro.
Ajustar la alcalinidad del agua de la piscina
Aparte de ajustar los niveles de pH y de cloro, hace falta ajustar la alcalinidad del agua de la piscina para eliminar la turbidez del agua en una piscina. La alcalinidad es la cantidad de componentes alcalinos que contiene el agua de la piscina, entre ellos carbonatos, bicarbonatos e hidróxidos. Para subir la alcalinidad proponemos un incrementador de alcalinidad lo cuál se constituye en bicarbonato de sodio. Al contrario, para bajar la alcalinidad recomendamos el uso de un minorador de pH.
Realizar un proceso de filtración para clarificar el agua
Para finalmente aclarar el agua turbia de una piscina hay que realizar un proceso de filtración. Cómo mencionado antes, filtrar bien el agua es esencial para un buen estado de la piscina. Un sistema de filtración suele tener dos elementos claves: el filtro y la bomba. Aunque existen distintos tipos de filtros como el de arena, todos tienen prácticamente el mismo funcionamiento: El agua de la piscina pasa por el skimmer impulsada por la bomba. Allí el filtro atrapa toda la suciedad y deja que el agua filtrada vuelva a la piscina.
Eliminar la acumulación de suciedad
Una piscina es vulnerable a suciedad de todo tipo por lo cual debemos intentar eliminar la acumulación de suciedad para prevenir el agua turbia en la piscina. Para mantener en buen estado una piscina de agua salada es recomendable un mantenimiento constante. Esto incluye por ejemplo retirar las hojas e insectos con una red de piscina, limpiar el fondo y las paredes de la piscina con un limpiafondos o con un cepillo empapado en lejía. Así puedes contribuir a la prevención del agua turbia en la piscina.
Tratamiento de choque
El tratamiento de choque es una técnica efectiva para abordar problemas de turbidez severa o situaciones en las que el agua de la piscina ha perdido su claridad y equilibrio químico. Este método, conocido como «shock» en el mantenimiento de piscinas, implica el uso de altas concentraciones de desinfectante, como el cloro, para eliminar contaminantes, bacterias, algas y otros compuestos que puedan estar causando la turbidez.
Limpieza del filtro
La limpieza del filtro es un aspecto fundamental en el mantenimiento de una piscina para garantizar un funcionamiento eficiente del sistema de filtración y contribuir a la claridad del agua. Los filtros de piscina pueden ser de diferentes tipos, como filtros de arena, cartucho o diatomeas (DE), y cada uno requiere un procedimiento específico para su limpieza.
La limpieza regular del filtro es esencial para mantener un rendimiento óptimo en la eliminación de residuos y partículas del agua de la piscina.
Remedios caseros para agua turbia en piscinas
Gracias a la implementación de técnicas de mantenimiento, descubrirás métodos efectivos para restaurar la transparencia del agua y mantener tu piscina en condiciones óptimas durante toda la temporada.
Tratamiento con bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio puede ayudar a estabilizar el pH del agua si este está demasiado ácido. Agrega gradualmente bicarbonato de sodio a la piscina y utiliza el kit de prueba para monitorear los niveles de pH hasta alcanzar el equilibrio deseado.
Comprobación de los niveles químicos del agua
Antes de aplicar cualquier remedio, es crucial verificar los niveles de pH, cloro y alcalinidad del agua de la piscina. Utiliza un kit de prueba para determinar estos parámetros y asegúrate de que estén dentro de los rangos recomendados. Un desequilibrio químico puede ser la causa principal del agua turbia.
Uso de medias o calcetines para filtrar
Para implementar este método, se pueden utilizar calcetines o medias de nylon limpios y preferiblemente nuevos. Estos se colocan sobre el extremo de un skimmer o dentro del cesto del skimmer, actuando como un filtro adicional a través del cual pasa el agua de la piscina antes de ingresar al sistema de filtración principal.
Aplicación de vinagre blanco
La aplicación de vinagre blanco en una piscina es un método casero que puede ayudar a mejorar la claridad del agua y mantenerla en condiciones óptimas. El vinagre blanco, conocido por sus propiedades desinfectantes y su capacidad para equilibrar los niveles de pH, puede ser una solución eficaz para combatir ciertos problemas que contribuyen a la turbidez del agua.
El vinagre blanco se vierte gradualmente alrededor de los bordes de la piscina para permitir una distribución uniforme en todo el cuerpo de agua. Su naturaleza ácida puede ayudar a combatir el crecimiento de algas y bacterias, contribuyendo así a la claridad general del agua.
Conclusión
El agua de tu piscina puede convertirse turbia por varios factores, entre ellos la acumulación de partículas o sedimentos y la contaminación por bacterias o algas. Para arreglar el estado del agua, debemos medir el pH y ajustarlo a buen nivel, balancear los niveles de cloro de la piscina y ajustar la alcalinidad del agua de la piscina. Además es recomendable realizar un proceso de filtración para clarificar el agua y eliminar la acumulación de suciedad.